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Mostrando las entradas de junio, 2011

Figuras inicuas

Triángulos amorosos cuadriláteros de lucha, círculos viciosos... corazones que no escuchan. Elipses excéntricos parábolas como acertijos vértices caprichosos amores desprolijos. Paralelos en desventaja hipérboles que envuelven bisectrices que no se presagian espacios que convergen. Espirales de mentiras rectas como abismos personas con aristas elementos de cinismo. Escaleno a la espera incentro de los implicados segmentos de quimeras resultante... damnificados

Humano tonto, loco idealista

"Homo sum: nullum hominem a me alienum puto."  "Soy hombre, a ningún otro hombre estimo extraño." "Del sentimiento trágico de la vida" - Unamuno Soy el resto del tiempo un exquisito placer del sentido enorme sentir del vacío humano tonto, simple y atrevido. Me comparo con las sombras equiparo rostros del recorrido; soy como el viento que azota... en cada hombre desconocido. Quizás soy como el cristo humano o como la puta llorona como los dioses paganos que los hombres adoran. Soy como el universo complejo, uniforme y sencillo; incluso estas lineas en verso elevan un poco mi ombligo. Interpreto lo que no dicen... ser hombre y humano no es lo mismo; pues uno es nuestro origen, y el otro... nuestro destino. Soy... el inicio de la historia el revés de un cuento; un cúmulo de memorias sin tabula rasa... por el momento. Y si ser humano está permitido entonces seguiré cuestionando... y propugno cambiar el sentido de existir...

Cinco cuartas

Vacío sin complejos tránsito de ilusiones personas como reflejos horas por montones. Días sin sentido noches de revueltas sombras del destino lutos entre fiestas. Írritos recuerdos maltrechas cuestiones los quintos infiernos cielos y nubarrones. Futuro entre cejas luz entre canciones mentiras tras las rejas pasados en cajones. Sol sin agonía luna con querencia humano en rebeldía dioses con paciencia.

Parte de la historia

Hay un lugar que yo me sé en este mundo, nada menos, adonde nunca llegaremos. Donde, aun si nuestro pie llegase a dar por un instante será, en verdad, como no estarse. Trilce - Vallejo Y si los sueños promueven el destierro de la certeza si la audacia de un cambio genera el fin de la batalla; donde morirán las ideas de grandeza y de amor y de nada. Y si las murallas no fueran pretextos para las renuncias si las estrellas surgieran del mar de la nostalgia; cómo evitar que tus mañanas se crucen con mi ayer. Y si ese lugar que buscamos fuera solo un desierto si nuestros ser capaces de olvidar se olvidan; como saber que el universo modifico a su antojo la verdad. Y si tu besos saben a fantasía si tus gestos son espejos de mi faz; donde queda el abismo y el tiempo y el adiós. Y si los presentes barajan pasados si los futuros asumen la realidad; a donde queda este juego de presente. Y si nuestras fronteras se convierten en simples calles si nuestra distancia se enamora d

No te Salves - Benedetti

No te quedes inmóvil al borde del camino no congeles el júbilo no quieras con desgana no te salves ahora ni nunca... No te salves no te llenes de calma no reserves del mundo sólo un rincón tranquilo no dejes caer los párpados pesados como juicios no te quedes sin labios no te duermas sin sueño no te pienses sin sangre no te juzgues sin tiempo... Pero si pese a todo no puedes evitarlo y congelas el júbilo y quieres con desgana y te salvas ahora y te llenas de calma y reservas del mundo sólo un rincón tranquilo y dejas caer los párpados pesados como juicios y te secas sin labios y te duermes sin sueño y te piensas sin sangre y te juzgas sin tiempo y te quedas inmóvil al borde del camino y te salvas... entonces... no te quedes conmigo.

Masa - Vallejo

Al fin de la batalla, y muerto el combatiente, vino hacia él un hombre y le dijo: «¡No mueras, te amo tanto!» Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo. Se le acercaron dos y repitiéronle: «¡No nos dejes! ¡Valor! ¡Vuelve a la vida!» Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo. Acudieron a él veinte, cien, mil, quinientos mil, clamando «¡Tanto amor y no poder nada contra la muerte!» Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo. Le rodearon millones de individuos, con un ruego común: «¡Quédate hermano!» Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo. Entonces todos los hombres de la tierra le rodearon; les vio el cadáver triste, emocionado; incorporóse lentamente, abrazó al primer hombre; echóse a andar...

Intuición

A veces me siento en el vacío arrimo los espacios contemplo la nada y rezo... casi sin sentido. A veces camino bajo la espera abro los manos animo la verdad y canto... casi sin ayer. A veces vuelo sobre mis locura asumo la libertad reto al mañana y sueño... casi sin dormir. A veces muero al despertar adquiero consciencia invento una fantasía y vivo... como cada día. A veces... me detengo... escucho, miro alrededor... veo la tierra y el universo... y comprendo... ¡casi sin entender! sin entender nada!

Historia del Azar

Cruzas el límite de la ilusión con la facilidad de la muerte y arrasas con los caminos allanando las victorias. Y cada vanidad es una traición, mentiras pronosticadas en el tiempo cómo cualidades de abismos anticipados por mis vacíos. Cada palabra que ha surcado tu sonrisa cada mito contado al futuro cada hito impuesto al pasado cada memoria enlatada en tu juego cada latido gritado con la amígdala... son impuestos cobrados en anticipo del balance y vaivén del universo; cual fariseo de inexorable postura. Y al final de la historia de ventanas de cruces y esperanzas... somos lo que el "universo del cómo" espera... humanos expuestos al infinito Y lo que se toca con la mente hace parte del amuleto del quizás del misterio de las miradas vacías de las certezas de los gestos... humanidad sin escapatoria segundos imponiendo la rutina historias del azar.

Promoviendo tu fe.

Te he dicho ya que la locura extrema el pensamiento que las cosas no son como deben, si no como son; la imperfecta idea de un sueño que es mentira de un cristal que opaca la luz de tu verdad de tus pasos ¡de tu adiós! Como no atreverme a cazar mariposas frente al sol como no atreverme a renunciar mil veces más si mi renuncia es la que promueve tu fe... y tu camino ¡y tu adiós! No sigas... gritas como un duende en deseperacion; pero sabes que estos ríos son cascadas de ilusiones de coartadas mal habidas entre sombras entre gestos que disimulan destellos de piedad. Y callo porque me lo pides con obsesión de asesina y porque esa misma fuerza es tu promesa... y tu reto y tu advertencia ¡y tu adiós!