Tuerto, rey de ciegos.

Cruzas el límite de la ilusión con la facilidad de la muerte y arrasas con los caminos allanando las victorias. Y cada vanidad es una traición, mentiras pronosticadas en el tiempo cómo cualidades de abismos anticipados por mis vacíos. Cada palabra que ha surcado tu sonrisa cada mito contado al futuro cada hito impuesto al pasado cada memoria enlatada en tu juego cada latido gritado con la amígdala... son impuestos cobrados en anticipo del balance y vaivén del universo; cual fariseo de inexorable postura. Y al final de la historia de ventanas de cruces y esperanzas... somos lo que el "universo del cómo" espera... humanos expuestos al infinito Y lo que se toca con la mente hace parte del amuleto del quizás del misterio de las miradas vacías de las certezas de los gestos... humanidad sin escapatoria segundos imponiendo la rutina historias del azar.

Anda... quítate el vestido... las flores y las trampas... "Anda" -  Aute Quítate el velo inexacto de tus complejos el rocío de ira que cubre tu mirar... comprende que a lo lejos el ser humano es mucho más complejo que tus rimas... sobre el mar. Renuncia al hastío de tus iras al relamido arte de ser tú... Comprende que en mis líneas más allá de las ironías existen sesgos de virtud. Compréndeme más allá de lo que quieres más allá de nuestros abismos... más allá de lo que intentas leer más allá... de nosotros mismos y de toda forma de ser. *colaboración de idea central del poema: Brendha Obregón - MediaLab.

No me provoques besos que los muertos... solo piensan en la eternidad. No me mires con esa sonrisa que tus labios... solo desean voracidad. No me tientes a tentarte que los dias... solo seran tristes sin ti. No me provoques mas que las ilusiones... ¡solas se hacen realidad!

Voy a rendirme ante tu boca... besarte esos labios... que me provocas y mientras roce tu piel con mis dedos mis besos alentarán tu anhelo... ...injustamente. ¡Entregaré toda la pasión te lo juro! seran dos o tres besos... eso es seguro y en cada entretiempo para el respiro tomaré fuerza de tus suspiros... ... irónicamente. Pediré perdón por este momento por la ilusion... por robarte el aliento porque si ante tu boca  he caido sera sólo arrebato con poco sentido... sinceramente.