No me provoques besos que los muertos... solo piensan en la eternidad. No me mires con esa sonrisa que tus labios... solo desean voracidad. No me tientes a tentarte que los dias... solo seran tristes sin ti. No me provoques mas que las ilusiones... ¡solas se hacen realidad!
Preludio de infinitos versos... epílogo de intensos vacíos.
por: Jerry Lynch Solis.